La Ruta de Ernest Hemingway por Navarra
Novelista y Premio Nobel, Ernest Miller Hemingway (Oak Park, Illinois, 21 de julio de 1899-Ketchum, Idaho, 2 de julio de 1961) está considerado como uno de los mejores escritores del siglo XX.
Dio vida a numerosos personajes en una veintena de obras literarias, entra las que destaca The sun also Rises (Fiesta). Una novela definitiva para el conocimiento y la internacionalización de las fiestas de San Fermín.
Ernest Hemingway en Pamplona ‘Sanfermines 1959: Ernest Hemingway en el objetivo de Julio Ubiña’
Hemingway acudió en nueve ocasiones a Pamplona, y desde su primera visita deambuló por las calles de la ciudad, bebió en sus tabernas y cafés, se deleitó con la comida autóctona, el encierro, las corridas y la alegría. El enigmático literato encontró en las fiestas de San Fermín la intensidad que pedía a la vida.
Pero además de Pamplona, otros escenarios navarros cautivaron e inspiraron al Premio Nobel por su paisaje y tranquilidad. Los turistas que viajan tras la huella del escritor buscando los rincones que él frecuentó podrán seguir esta ruta turística que recuerda y rinde homenaje a Ernest Hemingway.
Ruta de Hemingway en Pamplona:
- Plaza del Castillo: Bar Txoko, Hotel Quintana, Café Bar Torino, Hotel La Perla, Café Iruña, Café Kutz, Café Suizo.
- Paseo Sarasate (Antiguo Restaurante las Pocholas).
- Avenida San Ignacio (Hotel Yoldi).
- Calle Mercado (Casa Marceliano).
- Calle Eslava, 5 (Antigua pensión).
- Plaza de Toros.
Ruta de Hemingway en Navarra:
- Pamplona
- Burguete
- Aribe
- Lecumberri
- Yesa
Ruta Hemingway en Pamplona
Bar Txoko
En la terraza de este emblemático bar, así como en la del Café Iruña, es donde más veces fue fotografiado Hemingway. Este bar se sitúa en la esquina de la plaza del Castillo, donde desemboca la calle Espoz y Mina.
La Plaza del Castillo de Pamplona, epicentro de la presencia de Hemingway en Pamplona
Hotel Quintana
Este es uno de los lugares más emblemáticos de la biografía sanferminera de Hemingway. A pesar de que cerró sus puertas en 1936, todavía hoy son numerosas las personas que recorren la Plaza del Castillo en busca de un inexistente rótulo comercial del citado hotel.
Hemingway hizo famoso el lugar bautizándolo como Hotel Montoya, al igual que a su dueño, Juanito Quintana, le apodó señor Montoya. El carácter escandaloso del norteamericano obligaba a Juanito Quintana a asignarle una habitación diferente cada año buscando siempre que no molestase a sus clientes más distinguidos.
El establecimiento estuvo situado en el edificio existente sobre la Cervecería Tropicana y su aspecto exterior actual coincide con el que conoció Hemingway.
Café Bar Torino
Estuvo situado en el rincón del hotel La Perla, concretamente en el n.º 3 de la plaza del Castillo. Hemingway lo describió en su libro como Bar Milano.
Hotel la Perla
Hoy Gran Hotel La Perla, situado en una de las esquinas de la Plaza del Castillo, se alza elegante por encima del resto de edificios destacando con su fachada de color claro.
Fachada actual del Gran Hotel La Perla
La primera vez que Ernest Hemingway visitó Pamplona en 1923 no contaba con posibilidades económicas para poder alojarse en él. Cuando décadas más tarde, Hemingway regresó con una economía más saneada, pudo por fin alcanzar su sueño y ocupó la habitación 217 (hoy 201) con vistas a la calle Estafeta, desde donde podía ver por las mañanas el encierro.
Café Iruña
Fundado en 1888, su apertura sirvió para inaugurar oficialmente la llegada de la luz eléctrica a Pamplona. Hoy día este café sigue siendo el mismo lugar y con la misma ambientación de aquel café del siglo XIX «Belle époque». Un rincón apacible en el que parece haberse detenido el tiempo: mesas de mármol, columnas profusamente decoradas, grandes espejos, policromados escudos, una larga barra…
Si algo tiene este café es su condición de popular. En él ha convivido toda Navarra, la rural y la urbana, la elegante y la ruda; también el autóctono y el forastero, el bohemito y el yupi… En definitiva, un gran cajón de sastre en el que todos tienen cabida.
Hablar de Hemingway en Pamplona implica una referencia obligada a este café, su escenario preferido. De hecho, Hemingway, la terraza del Iruña y una buena copa de coñac son un trío de elementos difícilmente desligables. Gracias al autor, el café goza de una proyección internacional. Es por esto que en agradecimiento le han dedicado un espacio que sirve de homenaje permanente a la figura literaria.
Un punto donde el visitante encuentra el mismo escenario que conoció el escritor. En el lugar nos recibe una escultura en bronce patinado con una altura de 185 cm., una recreación a tamaño natural de Hemingway que apoyado en la barra recibe al visitante y ve desfilar el tiempo.
El Rincón de Hemingway en el Café Iruña de Pamplona
Café Kutz
No existe en la actualidad. Ocupaba el local situado entre el café Iruña y el Pasaje de la Jacoba. Hoy día los locales que ocupó el Kutz acogen una oficina bancaria.
Café Suizo
Ubicado en el n.º 37 de la Plaza del Castillo desde el año 1844 en que lo inauguraron los señores Matossi y Fanconi, de Suiza, fue el decano de los cafés de Pamplona. Hemingway citó este café en su novela Fiesta en dos ocasiones.
El establecimiento permaneció abierto durante 108 años y cerró sus puertas en 1952 dando paso a una oficina bancaria.
Antiguo Restaurante Las Pocholas
Poca gente conoce a este establecimiento por su verdadero nombre «Hostal del Rey Noble». A este restaurante, situado en el Paseo Sarasate (frente al Monumento a los Fueros) acudía Ernest Hemingway y acostumbraba a sentarse siempre en la misma mesa, próxima a la entrada, alineando caprichosamente su cabeza con la del rey Carlos III el Noble bajo cuyo busto escultórico se sentaba.
Aunque este local cerró sus puertas en el año 2000, el Gran Hotel la Perla recuperó su nombre, su historia y su comedor en la misma línea de calidad. Es allí donde ahora puede verse el antiguo rótulo de entrada del hostal del Rey Noble, el busto de Carlos III y las mimas sillas que Hemingway usó.
Hotel Yoldi
Situado en la céntrica Avenida de San Ignacio, en los años 50 del pasado siglo se consolidó como el hotel de los toreros, favorecido por la tranquilidad y a la vez por la cercanía al coso taurino. Hemingway visitaba en este establecimiento a su amigo torero Antonio Ordóñez.
Entrada del Hotel Yoldi, Pamplona
Antigua Casa Marceliano
Un rincón tradicional hoy transformado en oficinas municipales situado en la calle Mercado, en la trasera del ayuntamiento de Pamplona, al lado del mercado municipal.
El lugar era una clásica taberna de la Pamplona de antaño donde a Ernest Hemingway le encantaba ir a almorzar su bacalao al ajoarriero.
Antigua pensión de la calle Eslava, 5
No fue un lugar muy frecuentado por Hemingway, pero el 4.º piso de este edificio, y más concretamente la fonda que allí existió, acogió en 1923 el primer sueño del periodista en Pamplona.
Monumento a Hemingway
Situado delante de la Plaza de Toros, junto al callejón, da paso al paseo de Hemingway. Inaugurado el 6 de julio de 1968, es un bloque de granito de 8.000 kilos, obra del escultor Sanguino.
Escultura homenaje a Ernest Hemingway, Pamplona
Otros lugares que Hemingway visitó en Navarra
Burguete
La familia propietaria del Hotel La Perla de Pamplona descendía de Burguete. Todo parece indicar que fueron ellos quienes favorecieron el hecho de que Hemingway y sus amigos descubrieran la tranquilidad de este enclave del Pirineo navarro.
Unos días antes o después de las fiestas, el escritor se desplazaba hasta esta localidad para descansar, disfrutar del paisaje y pasear hasta el río Irati para pescar alguna trucha.
Burguete, un bello pueblo en el Pirineo de Navarra
Aribe
El río Irati es el lugar que Hemingway eligió para pasar largas horas de soledad sentado cerca de la orilla bebiendo cervezas y esperando a que alguna trucha picase el anzuelo. Acudía andando desde Burguete hasta Aribe, en el valle de Aezkoa. Su lugar preferido era cerca de los Baños de Aribe.
Lekunberri
Un marco natural de gran belleza que el escritor norteamericano eligió en 1931 para descansar, desconectar del bullicio de la fiesta y llenarse de paz. Hemingway se alojó este año en el Hotel Ayestarán.
Yesa
1959 fue el último año que Ernest Hemingway visitó Navarra. La revista Life ese año quiso dedicar un amplio espacio a la figura del escritor y fue él mismo quien propuso que las imágenes de pesca fueran captadas a la orilla del embalse de Yesa.
Embalse de Yesa (Foto: miguel ramon / Flickr)
Observaciones
La ruta en Pamplona es un cómodo paseo por los principales lugares que Hemingway visitó. Para poder hacer la ruta por el resto de Navarra es necesario un vehículo a motor, ya que el total kilómetros a recorrer es de 130 aproximadamente.
