El puente Románico de Puente la Reina
El puente románico de Puente la Reina es uno de los ejemplos de arquitectura civil más interesantes del Camino de Santiago en Navarra. En él confluyen la ruta jacobea que entra por Roncesvalles y la tolosana de Somport.
Es punto de encuentro de peregrinos que han tejido a lo largo de los siglos miles de historias y leyendas. Las aguas del río Arga, que discurre bajo la imponente arcada del centenario puente, susurran los más sorprendentes relatos a los viajeros que se dejan cautivar por su murmullo. Sólo hay que prestar atención y podrá escuchar la pintoresca leyenda del «txori».
El puente románico de Puente la Reina da nombre a esta localidad, que es capital del valle de Ilzarbe o Valdizarbe, en la Zona Media de Navarra.
Este puente sobre el río Arga fue levantado en el siglo XI, al parecer, por iniciativa de una reina, que pudo ser doña Mayor de Castilla, esposa de Sancho el Mayor, o doña Estefanía, mujer de García Nájera. El objeto de su construcción: facilitar el paso a los peregrinos del Camino de Santiago a su salida de la villa, tras atravesar la Rúa Mayor.
Constituye uno de los ejemplos de románico civil más señoriales de la ruta jacobea. Destaca principalmente por su elegancia y sobriedad. Cuenta con 7 arcos de medio punto, el más oriental bajo tierra, y 110 metros de largo. Entre los arcos se abren unos arquillos, a modo de respiraderos, que aligeran la estructura y permiten que el agua discurra cuando el río va creciendo. Tuvo 3 torres defensivas, dos en sus extremos y otra central, en la que se ubicaba la imagen renacentista de la Virgen del Puy o del Txori.
En torno a esta virgen existe una leyenda que cuenta que la imagen recibía la visita de un pajarillo («txori» en vascuence), que la cuidaba y acicalaba quitándole las telarañas de sus alas y lavándole la cara con agua que recogía en el Arga. Dicen que el día que aparecía el «txori» se echaban las campanas al vuelo y se celebraban fiestas religiosas.
Si te acercas hasta el puente no encontrarás allí la imagen de la virgen, puesto que en 1843 fue trasladada a la iglesia de San Pedro ubicada cerca del río. Merece la pena una visita a esta iglesia, notable por sus retablos, así como acercarse hasta la iglesia de Santiago el Mayor, que cuenta con una bella portada románica de influencia mozárabe y en su interior alberga una apreciada imagen gótica del apóstol Santiago.
Fuente de los datos: Gobierno de Navarra