Belén viviente de Peralta
Peralta, a 33 kilómetros al sur de Olite, cada año retrocede 2000 años en el tiempo para celebrar uno de los actos navideños más coloridos y curiosos de Navarra: el Belén viviente de Peralta.
La localidad entera se transforma en un inmenso belén donde se escenifican situaciones de la vida cotidiana de hace dos milenios, mientras el párroco de la localidad narra el auto de la celebración por megafonía.
Esta gran obra de teatro, en la que participan cientos de peralteses, se desarrolla por el casco antiguo de la villa, en un recorrido de aproximadamente un kilómetro, desde la iglesia de San Juan Bautista hasta los alrededores del Campanar.
Y a lo largo del trayecto el visitante encuentra de todo: sinagoga, botica, palacio del gobernador Quirino — donde históricamente se encontraba el registro—, lechería, posadas, panadería, alfareros, costureros, molineros, bailarinas… y, por supuesto, José, María y el Niño en el portal.
Este día, cientos de personas de distintas provincias, ciudades y pueblos de Navarra se acercan para ver y escuchar el Auto de Navidad que tiene lugar en el Casco Antiguo de Peralta.
Se trata de un Belén en el que se cuida hasta el mínimo detalle, donde se huye del espectáculo y donde se pretende incentivar y consolidar el espíritu cristiano de la Navidad. A través de un gran sistema de megafonía, a lo largo del recorrido, se va intercalando música clásica de navidad e invitando a sumergirse en el Belén como personajes activos.
Participantes
Diversas personas de Peralta y unos 200 padres de alumnos preparan durante semanas ropas, adornos y todo tipo de complementos.
Los vecinos de la zona ceden sus casas, portales y muebles. Como actores participan principalmente alumnos de 5.º y .6º de Primaria, y de 1.º, 2.º y 3.º de ESO.
El auto de la celebración está escrito y narrado por el párroco de Peralta, Javier Leoz.
Durante la celebración, José y María pasan a inscribirse por el Palacio del Gobernador Quirino, y recorren sin encontrar alojamiento hasta tres posadas.
Junto a las hilanderas, lavanderas, cesteros, alfareros, los pastores participan del diálogo del Ángel anunciador.
Al final todos juntos acuden a adorar al Niño que ha nacido en el Portal.
Tampoco faltan las degustaciones gastronómicas con puestos de chistorra, castañas, palomitas, tortas, migas, vino y queso.
Un buen plan navideño para toda la familia.
Plano del Belén Viviente de Peralta
(Fotografías: Belén Viviente de Peralta en Facebook)
Muy cerca de Peralta se encuentra Marcilla, a donde puedes acercarte para contemplar y conocer el Castillo de Marcilla, una fortificación gótica levantada en el siglo XV, situada en el centro de la villa.